23 de junio de 2010

Remedio

Me desperté sintiéndome bastante mal, dolor de garganta, congestión, dolor de cabeza. Decidí no levantarme, dar aviso de enfermo y quedarme en mi casa. Las veces que me ha pasado esto, aprovecho ese tiempo en soledad, hago algo productivo, o al menos no me paso todo el día acostado. Hoy fue la excepción, estaba falto de fuerza de voluntad, o tal vez me sentía peor de lo que pensaba, o no sé... el hecho de que hubiese 4 partidos mundialistas me mantuvo acostado. Lo único que hice fue estirar la mano, agarrar un ibuprofeno y tomármelo, así...sin agua (benditas cápsulas líquidas). Recién a las 18.30 hice un esfuerzo y me levanté, pero para abrirle la puerta a Sol, costó pero pude atravesar ese molesto pasillo que separa mi casa de la puerta de entrada. Calenté agua, hice unos mates, miré algún que otro resumen de esos partidos que ya había visto, unos minutos de "Friends", hablamos, sentados, acostados, en la cocina. No sé, tal vez me hizo bien...pero me siento mejor que a la mañana. Por ahí lo que necesitaba era alguna excusa para despegarme de la almohada, y que mejor que SU visita, para activarme. En fin, no estoy como nuevo, pero me siento otro del que era hoy a las 8 a.m.

"I'm gonna love you
Till the stars fall from the sky for you and I"

No hay comentarios:

Publicar un comentario